La tercera edición de ECOMOV Network trató los retos actuales y futuros que llegan con la electrificación del mercado del automóvil, una mesa de debate con la Generalitat, Kia España, Zunder y Balearia

El vehículo eléctrico está cada vez más presente en nuestras calles, y también es ya una realidad en la lista de la compra de muchos conductores que están buscando un coche nuevo. Los desorbitados precios de los combustibles, el avance de las tecnologías del vehículo eléctrico que nos dan una mayor seguridad y el futuro de las ciudades y las marcas con las nuevas imposiciones de la Unión Europea hacen que la movilidad eléctrica siga creciendo cada año a pasos agigantados.

El pasado martes 21 de junio se celebró en LAS PROVINCIAS una nueva edición de ECOMOV Network, una mesa de debate de expertos en la que, en esta ocasión, se repasaron los retos de la electrificación del mercado del automóvil, una jornada en la que tuvieron voz los principales actores de esta temática: la administración, las marcas de vehículos, los puestos de recarga y los conductores de vehículo eléctrico. Concretamente, estos protagonistas fueron Paula Tuzón, secretaria autonómica de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Daniel Pérez, CEO de Zunder –empresa de cargadores de vehículos eléctricos–, Carlos Sánchez, director de estrategia de vehículo conectado, autónomo, electrificado y movilidad como servicio en Kia España, y Javier Cervera, responsable de transición energética en Balearia y usuario de vehículo eléctrico en su día a día.

Clave para esta década

El primer turno de palabra lo tuvo Paula Tuzón, que comenzó su ponencia aclarando que, «dado el desequilibrio climático sin precedentes, los retos del vehículo eléctrico es uno de los temas principales a tratar para esta década y este siglo, ya que lo que pase en esta próxima década va a ser clave para el siglo», aseguró. La secretaria autonómica de Emergencia Climática y Transición Ecológica marcó dos líneas claras de acción para atajar estos retos: por un lado, apuesta por un cambio del marco regulatorio con incentivos, pero también con nuevas normativas de movilidad en las ciudades. Por otro lado, abogó por las inversiones para este cambio de movilidad con subvenciones para proyectos innovadores, puntos de recarga, flotas de vehículos ecológicos, placas solares… y, todo ello, con apoyo a las empresas de I+D+I ya que, como dijo Tuzón, «necesitamos conocer más todo lo que rodea al vehículo eléctrico».

Además, también comentó que la Comunidad Valenciana está preparada para apostar por este tipo de empresas, y puso de ejemplo la gigafactoría de baterías de Sagunto: «Si no invertimos en innovación, lo harán otros».

Apuesta por la carga rápida

Zunder es una de las mayores empresas de puntos de recarga en España. Su apuesta principal es por la carga ultra rápida y están invirtiendo en la instalación de puntos de hasta 350 kilovatios, desplegando estaciones en ciudad y en carretera y, además, como declaró su CEO, Daniel Pérez, otro de los retos de su empresa es instalar estos puestos «con paneles fotovoltaicos, para que la energía con la que se alimente nuestro vehículo eléctrico sea limpia y renovable».

En este sentido, Pérez comentó en que una parte del miedo de los conductores pasa por la señalización: «Al igual que en las señales de tráfico nos indica dónde hay una gasolinera, cuando veamos de forma habitual por nuestras carreteras señales de puntos de carga los conductores irán perdiendo el miedo progresivamente». Por otro lado, también insistió que los cargadores «además de ser visibles, deben funcionar bien, y con esto, sumado a la carga ultra rápida, se equiparan e incluso se mejoran los tiempos respecto a un repostaje habitual, ya que el tiempo medio de uso de un cargador ultra rápido es de 15 a 20 minutos».

Además, también destacó que no todos los conductores españoles tienen garaje, por lo que «queremos que los puntos de carga sean accesibles para todos. En España solo el 30 por ciento de la población tiene garaje, queremos que la movilidad eléctrica sea para el cien por cien de la población, no solo para ese 30 por ciento.

Las marcas se adaptan

Otro punto importante es la inversión que las marcas de vehículos están realizando para adaptar sus modelos y transformarlos con mucha innovación e investigación. El director de estrategia de vehículo conectado, autónomo, electrificado y movilidad como servicio en Kia España, Carlos Sánchez, especificó que en el grupo Kia-Hyundai cuentan con 10.000 ingenieros en Seúl trabajando en esta transición al vehículo eléctrico, unos ingenieros que, sobre todo, «apuestan por abaratar costes, aumentar la autonomía y, sobre todo, optimizar la velocidad de recarga», comentó Sánchez, quien añadió que «la oferta de coches actual es muy amplia para llegar a todos los públicos, pero no todos controlan ni conocen los diferentes tipos de tecnologías que se ofertan en el mercado». En esta línea, Carlos Sánchez cree que las marcas deben saber informar al cliente, y ya se está trabajando en ello, aunque, según él, el vehículo eléctrico todavía no es apto para todo el mundo: «No todos están predispuestos a hacer esta inversión, todo el que prueba un eléctrico se quiere quedar con él, pero el precio, la batería y otros factores complica su venta. Tenemos que dar soluciones e información al cliente».

Además, el representante de Kia declaró que «nadie compra coches eléctricos porque no hay cargadores, y no se ponen cargadores porque no hay coches, así que las instituciones públicas deben ser la palanca para que todos juntos podamos sacar adelante esto», concluyó.

Conductores satisfechos

La realidad de los conductores de vehículos eléctricos es que están muy satisfechos con su compra, así lo hizo saber Javier Cervera, responsable de transición energética en Balearia y usuario de un vehículo eléctrico: «Soy una persona que viaja mucho en coche, en torno a 80.000 kilómetros al año. Mi coche tiene unos 500 kilómetros de autonomía y sí he notado una mayor tranquilidad ahora que hace unos años. Se puede viajar sin miedo en España, el mes pasado recorrí 10.000 kilómetros y calculé un ahorro mensual de 600 euros respecto al mismo recorrido con un vehículo de combustión.

Cervera, además del ahorro del combustible, también presumió del ahorro en mantenimiento: «en tres años con mi vehículo eléctrico con el que he hecho casi 300,000 kilómetros, tan solo me he gastado en el taller 200 euros por una pieza de plástico».

Retos y conclusiones

Durante el debate, se dejaron muchas reflexiones interesantes desde todos los ámbitos. Paula Tuzón comentó que «desde la administración no se puede penalizar a la gente que no tiene recursos para comprar un coche, por eso las penalizaciones hay que ponerlas en las nuevas matriculaciones, así damos a los compradores la oportunidad de decidir. También las empresas deben dar un paso adelante con sus flotas de vehículos».

En este sentido, Daniel Pérez hizo hincapié en que queda mucho por hacer desde la administración: «Hacen falta muchos permisos para abrir una estación de carga, el periodo medio en España es de 18 meses, mientras que en Francia nos dan tres meses de tiempo de respuesta y en seis meses la estación está abierta. Vamos un año por detrás de Europa». Además, Pérez habló sobre el uso abusivo de los puestos de carga gratuitos: «Muchos usuarios hacen un uso abusivo de los puestos gratuitos. El usuario que termina de cargar y deja aparcado el coche sin retirarse del puesto de carga impide que otros usuarios puedan cargar su coche. Hay que limitar el acceso para que se pueda hacer un uso racional. En Palencia, el 87 por ciento de cargadores públicos están ocupados las 24 horas, si se regula un pago eso se reducirá. Daniel Pérez también indicó que esperan un crecimiento muy grande del coche eléctrico en los próximos dos o tres años.

Carlos Sánchez destacó que desde las marcas, en muchas ocasiones, para no pagar las multas de la Unión Europea están «forzando la demanda con calzador», y que «cuando la capacidad de producción de los eléctricos lo justifique, los precios bajarán».

Por su parte, Javier Cervera comentó que las flotas de vehículos en Balearia son de coches eléctricos, están invirtiendo en los biocombustibles para los barcos y cree que el crecimiento del vehículo eléctrico será exponencial: «Habrá un punto de inflexión, como lo hubo con el paso de los teléfonos móviles antiguos a los smartphones. Además, con los precios de los combustibles y el gasto de un eléctrico de 6,50 euros por recorrer cien kilómetros, se antepondrá la preocupación del dinero a la preocupación del ‘dónde cargaré’».