Volvo es una de las marcas tradicionales más avanzadas en eco-movilidad, y es que todos los modelos de la marca sueca tienen ya en su gama una versión híbrida enchufablecon etiqueta cero, y por tanto con un funcionamiento en los trayectos más cotidianos que se puede realizar siempre en modo eléctrico. El último en llegar a esta familia es el SUV comapctdo XC40 que, aunquehabía anunciado previamente su versión totalmente eléctica, llega primero en esta versiñon ‘Recharge’ destinada a convertirse en el modelo más vendido de la gama.

Los motivos son varios, y aunque el precio inicial no es tan accesible como el resto de la gama –desde 45.000 en el caso del híbrido frente a los 30.000 de la gama gasolina–, las grandes ventajas de los coches con etiqueta cero impulsarán sus ventas.

Interior con la calidad habitual de la marca sueca.

Para este modelo Volvo utiliza un motor eléctrico de 82 CV alimentado por una batería de poco más de 10 kilowatios con los que se consigue una autonomía homologada de 50 kilómetros. En cuanto al motor de gasolina podemos elegir dos versiones del 1.5 litros turbo, con 130 o con 180 CV, lo que nos da una potencia final de 211 o 262 CV. La diferencia de precio es de apenas mil euros, por lo que la versión más potente parece la más apetecible, aunque se incremente ligeramente el consumo.

Los cambios son pocos, y por fuera solo la toma de recarga en la aleta delantera de la parte del conductor y algunos logotipos nos harán ver que estamos ante la versión más ‘eco’ de la gama. Por dentro hay retoques en el cuadro de mandos digital y algunos detalles de equipamiento, pero nada especialmente reseñable. Una buena noticia es que el XC40 mantiene el volumen de maletero, con 480 litros. Pierde el doble fondo inferior y el depósito de gasolina pasa de 55 a 48 litros, más que suficientes para el uso en carretera en largos viajes.

Como es habitual en este tipo de coches, hay varios modos de conducción disponibles, normal, eco y eléctrico, pero también permite recargar la batería con el motor de gasolina o aguantar la carga de la batería para el momento en el que llegamos a una ciudad, por poner un ejemplo.

En cuanto a la recarga, oscila entre las 14 horas de un enchufe doméstico y las apenas dos horas de un cargador rápido. En todo caso, son cifras en el promedio habitual del mercado de enchufables.

El Volvo XC40 Recharge se puede acoger a las ayudas del Plan Moves, que no exigen entregar ningún coche al desguace para tener un incentivo de 1.900 euros. Además Volvo se compromete a regalar la energía eléctrica utilizada durante el primer año de posesión del vehículo, una buena oferta para decidirse por uno de los SUV premium más atractivos y ecológicos del mercado sin renunciar al espacio o la potencia.

Tamaño compacto pero amplio interior en este SUV.

LAS PROVINCIAS EXTRA MOTOR (https://www.lasprovincias.es/motor/novedades/volvo-xc40-recharge-20200629125503-nt.html)